viernes, 15 de mayo de 2015

¡Tanto por mejorar!... /
De un tiempo a esta parte, como quiera que voy conociendo más y más el mundo actual, sus ‘procedimientos’, sus flagrantes injusticias y sus tremendas desigualdades, pues…, en cierto modo, en parte, voy comprendiendo y ‘empatizando’ con los llamados movimientos o grupos ‘antisistema’. Y si, en ‘una pequeña parte’ –como decía- comprendo lo que sienten y lo que piensan; aunque, está clarísimo que no comparta en absoluto sus frases al respecto, sus violentas manifestaciones y ‘sus maneras’. Por ello, me apresuro a decir o a dejar constancia de que, por supuesto, no seré yo de esos que se manifiestan violentamente por las calles de cualquier ciudad, alborotando todo, incendiando contenedores, destrozando escaparates, cabinas telefónicas, alumbrado público –todo aquello, que se ha dado en llamar ‘mobiliario urbano’-, sedes de Bancos, apedreando edificios oficiales, enfrentándose con la policía ‘anti-disturbios’, etc., profiriendo estentóreos insultos a políticos, banqueros, autoridades y demás, enarbolando también banderas republicanas, o con la efigie del ‘che Guevara’ e, incluso, de índole yihadista –que es lo que está de moda- o enalteciendo incluso a los valerosos (¿) ‘gudaris’ de ETA. No, lo tengo clarísimo; en todo caso, yo sería –si es que sigo con estos pensamientos y por estos derroteros- un ‘antisistema’ pacífico y dialogante; pero, eso sí, muy muy crítico con todo aquello -¡que es muchísimo y variado!- que merece ser criticado y ser ‘puesto en solfa’, y que el mundo ¡necesita! cambiar ¡ya! ¡con urgencia! Pero, la cuestión es esta: ¿alguien escucha a los que no pensamos igual que ‘los de arriba’?... No; mientras ellos –‘los de arriba’- puedan seguir viviendo confortablemente en sus paraísos, ¿qué les importa todo lo demás?... Se dice, que los políticos han sido elegidos por el pueblo, para ser los representantes de ese pueblo y para estar pendiente de sus reivindicaciones y de sus necesidades. Pero, ¿acaso muchos de ellos han medio digerido este concepto, esta idea o definición, y esta responsabilidad?... Yo, sinceramente, me niego a creer que estos políticos del actual gobierno de la nación, que se jactan de habernos subido
generosamente en un 0’25 % la cuantía de nuestras pensiones, y que además algunos de ellos –concretamente  la ministra de Empleo F. Báñez y el ministro de Hacienda C. Montoro- alardeen y proclamen que con esta generosa subida (¿) ‘se garantiza asi el poder adquisitivo de dichos jubilados’…, y por esto y por otras muchas razones me niego a creer, decía, que ninguno de estos señores me ‘representen’ a mí en el Congreso de los Diputados. Así de claro. (Y a propósito de este tema, me decía un compañero: ‘pues, peor sería que te hubiesen bajado la pensión’. A lo que le contesté: ‘¡por supuesto!...; y peor aun sería ¡que me hubiesen fusilado!’).
Y es que, en definitiva, el mundo actual está orientado, proyectado, estructurado y conformado –pero desde luego, sin la conformidad ni la connivencia de muchos miles de millones de personas-, para que vivan a lo grande y para que se enriquezcan desmesuradamente 4 millones de personas (es un decir), mientras que…, otros 4.000 miilones, permanezcan y sobrevivan casi casi miseramente, e incluso muchos de ellos, en lo que se ha dado en llamar ‘el umbral de la pobreza’, o ‘en riesgo de exclusión social’. Por cierto, ¡qué bonito suena eso tan manido de ‘la cohesión social, o ‘el reparto equitativo de la riqueza’; pero, es que muchas veces son ‘frases hechas’, que quien las pronuncia cree él que queda muy bien con el auditorio, pero que, en el fondo, son como palabras ‘huecas’, vacías y carentes de contenido y…, que ya ¡nadie se las va creyendo! (A veces, yo pienso que no se las creen ¡ni los que las pronuncian!) ¿Qué les parece, amigas y amigos lectores, que haya actualmente en España más de 2.700.000 familias en las que no entra ¡ni un euro! cada mes en sus casas?... O, ¿qué les parece que haya infinidad de ‘dependientes’ a los que se les ha suspendido o retirado la ayuda social que percibían, y que a causa de ello se vean obligados a malvivir, sin poder quizás ni tan siquiera levantarse del lecho o de la silla de ruedas en los que permanecen anclados de por vida?... ¡Acaso consiste en esto, eso que pomposamente llaman ‘cohesión social’?... Y, ¿qué les parece que se les haya estado ‘inyectando’ a los Bancos (o Cajas) ¡miles y miles de millones de euros!, mientras hay muchísimos miles o millones de personas que están pasando auténtica hambre?... ¿Acaso son más importantes los Bancos que las personas?... Claro que, mientras políticos y banqueros ‘caminen’ en una misma dirección y sean –casi- una misma cosa, ¡apañados estamos!
Y si nos fijamos un poquito en las Leyes… En la Constitución española, se proclama que ‘todos los ciudadanos españoles, somos iguales ante la Ley’. Pero, yo creo que todos y cada uno de nosotros, tenemos ‘in mente’ un variado ‘abanico’ de casos, en los que –al parecer- esta norma que es Ley, sencillamente, no se cumple, no es cierta. Podríamos, p.e., recordar los casos de Bárcenas, de Urdangarín (y su real esposa), de Rato, de Blesa, de Marjaliza, de los Pujol, de ‘el bigotes’, de los de las ‘tarjetas ‘black’, de aquellos responsables -¿fue desde ‘CaixaGalicia, o desde 'NovaCaixaGalicia'?- que arruinaron a miles de ciudadanos (personas muy mayores; pensionistas, en su mayoría) con las famosas ‘preferentes’, de los ‘filatélicos’ de ‘Forum Filatélico’ y ‘Afinsa’, de Chaves y de Griñán, de los ERE de Andalucía, de los del Palacio de la Música de Barcelona, etc., etc. Y es que ocurre a veces, que los respectivos procesos judiciales se van alargando y demorando tantísimo en el tiempo que, es posible –digo posible-, que lo que se pretenda precisamente es que la ‘ciudadanía’ se olvide de ellos… Y al final, tal vez, se da la circunstancia de que cuando el juez de turno decide dar por terminado el proceso y emitir un juicio definitivo y concluyente…, ¡caramba!, muchos de esos ‘casos’ resulta que ¡han prescrito! ¡Qué casualidad! Y en fin, eso de que se castigue a un miembro de ETA –por poner un ejemplo- con 2.600 años de cárcel, y…, que a los 6 u 8 años –ya saben: amnistías, beneficios penitenciarios por buena conducta, arrepentimiento, haber practicado ‘yoga’ en la cárcel, ‘tercer grado’, etc.-, estén ya en sus casitas y/o paseando tranquilamente por las calles…, bueno, esto es ya delirante, y parece –casi- de ciencia ficción.
Y para colmo de males, la deuda del Estado español, se ha disparado, se ha despeñado; y se nos antoja ya como descomunal, casi aterradora… Si, la deuda del Estado de España, asciende ya -¡agárrense!-, en Marzo de 2015, a… ¡1’04 billones de euros! (si: billones, con b de burro). Cuando en 2014, era ‘solo’ del 97’7 % del PIB (ya saben: Producto Interior Bruto). Es decir, que España –y nosotros los españoles, claro- ¡estamos en quiebra! ¡en bancarrota!... Y costará muchos años, muchos esfuerzos y muchos sacrificios normalizar esta delicadísima situación (Ya desde Bruselas, nos están ‘señalando’, y advirtiéndonos que es absolutamente necesario e imprescindible bajar las vergonzosas cifras de paro y disminuir además esta tremenda deuda). Y se vislumbra en el horizonte -¡ojalá me equivoque!-, que ¡nos van a freir a más impuestos!. Porque está claro, que alguien tiene que pagar esto y arreglar así este ‘pequeño’ desfase, este desaguisado, ¿no les parece?
Y le deja a uno perplejo y le duele, saber –ayer supe esa noticia- que se han pagado ¡160 millones de euros! por un Picasso, mientras…, millones de niños en el mundo entero (pero sobre todo en países del continente africano) mueren de hambre y/o padecen acentuada malnutrición y enfermedades tales como malaria, cólera, paludismo, dengue, etc. (Claro que, el millonario que ha comprado ese cuadro, tenía perfecto derecho a hacerlo, a gastarse su dinero a su antojo, a darse ese capricho. Pero, ¿no podía haber pensado en dar un mejor destino a esos muchos miles de millones que le sobran?... ¡Qué mundo tan absurdo y tan loco!).
Si, admitamos que las democracias son mejor sistema para gobernar un país que, p.e., las dictaduras o los regímenes totalitarios… Pero, ¿es posible que no haya ningún otro sistema mejor que ‘estas’ democracias?... Que estas democracias, si, en donde ‘el solar patrio’, el país entero, llega a convertirse en una especie de cortijo privado en donde hacen y deshacen ‘los que mandan’ -¡tantas veces enriqueciéndose desmesurada e ilícitamente a costa de ‘los dineros públicos’!-, mientras los demás ‘ciudadanos’, los españolitos de a pié (como yo digo siempre),  somos simples comparsas, como muñequitos, como títeres –cuyos ‘hilos’ manejan los que mandan-, que no tenemos derecho a nada, que hemos de ‘tragar’ y de apechugar con todos sus errores y con todas sus corruptelas, sin poder levantar la voz ni tener derecho a denunciar, a decir alto y claro lo que pensamos!... ¿Qué los políticos piensan en los ‘ciudadanos’ y en el bien común?... ¡No me lo creo!
En fin; aquí dejo estas líneas… En donde he expresado –con más o menos acierto o fortuna- unas ideas, unos pensamientos (Que, a veces, nuestras neuronas ponen o colocan en el ‘orden del día’ y como prioritarias)… Y ocurre que, ¡es que está uno ya tan harto de tantos desmadres, de tantas injusticias, de tantas promesas incumplidas, de tantas autovías sin vehículos o de tantos aeropuertos sin aviones, de tantos ‘aforados’, de tantas desigualdades, de tantas mentiras, de tantísimo dinero malgastado, de tantísimas corruptelas, de tantas frases vacías!…
Vds. me disculparán si es que les ha parecido que he expresado o he dicho alguna inconveniencia. Y es que estas líneas, las he escrito ‘a vuela pluma’, de sopetón…; y más, desde luego, con el corazón que con la mente.

                          Rafael Ild. Pérez-Cuadrado de Guzmán

                                   Escrito, el J14. Mayo. 2015

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