jueves, 27 de enero de 2011

El espíritu, debemos mantenerlo, ¡siempre alegre! /
    Y para ello, nada mejor que ¡reirnos con ganas!. Sí, porque la risa es, 'el alimento del espíritu'. Pero, ¿a qué se debe ello?... El cerebro -y más concretamente, la hipófisis-, produce en pequeñas cantidades un neurotransmisor cercano a las hormonas, llamado endorfina, y a la que podríamos definir como 'la hormona del bienestar' o 'la hormona de la alegría'. Esta producción, eleva extraordinariamente su tasa en el organismo cuando reimos y también con el ejercício físico. Y sus efectos son maravillosos; así: aumenta la alegría y la vitalidad,  y disminuye o calma el dolor, consiguiendo de esta manera un aumento del bienestar, de la felicidad, de la euforia, de la autoestima y de las ganas de vivir; e iguálmente, nos libera de las preocupaciones y del 'stréss', y conseguimos así un alivio inmediato de la ansiedad y del insomnio; y, por si todo ello fuese poco, nos ayuda también a combatir el miedo y a reducir los problemas cardio-vasculares. Es, pues, como una 'pócima milagrosa' que podemos activar, sencillamente..., ¡con la risa!
    De manera que, ya lo saben: ante los 'malos tragos', ante las adversidades, ante las malas noticias, ante las incipientes depresiones, ante las enfermedades..., tenemos un formidable remedio, asequible además -en esta etapa de tremenda crisis- a todas las personas y a todas las economías: ¡reirnos con frecuencia y... ¡con ganas!
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    (El nombre de 'endorfina', deriva del hecho de que produce los mismos efectos que los analgésicos opiáceos (Vendría por tanto, a querer significar algo así como 'morfina endógena').   Las endorfinas, se sintetizan a partir del gen de la propiomelanocortina, que al hidrolizarse, produce entre otras hormonas, las endorfinas. Quimicamente, son polipéptidos largos, que activan nucleos neuronales en el cerebro (hipotálamo, amígdala, tálamo y otros), produciendo a través de estos los efectos mencionados).

                                                                       Escrito por Raffaello
                                                                                     J03.02.2011


Al final de estas 'gansadas', hay unos vídeos muy graciosos.


Qué le dijo......



¿Un chinche a una chinche?...

Te amo chincheramente.



¿Un semáforo a otro?...

No me mires, que me estoy cambiando...



¿El café al azúcar?...

Sin ti, mi vida es amarga.



¿Un pato a otro pato jugando a las carreras?...

Vamos empatados.



¿Una iguana a la otra?...
Somos iguanitas.



¿Un ojo al otro?...

Tan cerca y... ¡ no nos vemos!



¿Una pared a la otra pared?...

Nos vemos en la esquina.



¿Una oreja a la otra? ...

Con tanta cera y ... ¡no brillamos!



¿Un celular a otro celular?...

Tengo celulitis.



¿El cuchillo a la gelatina?...

¡No tiembles, cobarde!



¿Un español a un chino?...

'Hola'. Y el Chino contesta: 'las doce y tleinta'.



¿Saben por qué mataron a Kung Fu?...

Porque... lo kunfundieron.



¿Por qué un libro de matemáticas se suicidó?...

Porque tenía ¡muchos problemas!



¿ Por qué las gallinas quieren tanto a sus pollitos?...

Porque les costó ¡un huevo! tenerlos.


Libérate del stréss, y... ¡RÍE UN POCO, por favor!

    En fechas sucesivas, procuraremos ir trayendo a estas páginas, temas o chistes que ¡nos ayuden a reir, y así..., ¡a ser más felices!
    No se olvide, por favor..., ¡ríase con ganas!


No pude ser médico.   Vea y escuche estas graciosas parodias.
Los restaurantes, ya no son lo que eran.

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